Uno de cada cinco perros adultos sufre de osteoartritis, una afección progresiva y dolorosa que reduce la movilidad y la calidad de vida1.
En un estudio histórico, los investigadores de Purina monitorearon la salud de 48 labradores Retriever desde que eran cachorros, durante toda su vida2. Los resultados mostraron que los perros alimentados para mantener una condición corporal delgada desde que eran cachorros y durante el resto de su vida tenían significativamente menos osteoartritis, además de tener una expectativa de vida más prolongada2-4.
En este estudio, la media de la edad en la que el 50 % de los perros en cada grupo requirió por primera vez un tratamiento a largo plazo para la osteoartritis fue significativamente (P < 0.01) más tarde para el grupo de alimentación magra (13.3 años) que para el grupo de control (10.3 años)2.
A los dos años, la frecuencia de displasia de cadera en los perros que consumían alimentos magros fue un 50 % menor que en el grupo de control; además, la displasia de cadera fue mucho menos grave5.
Al final del estudio, solamente el 50 % del grupo de alimentos magros presentó signos radiográficos de osteoartritis de cadera en comparación con el 83 % de los perros del grupo de control3.
Mantener una condición corporal magra también dio como resultado una menor prevalencia y gravedad de osteoartritis de hombro y osteoartritis de codo, respectivamente, a los ocho años4.