El corazón puede latir más de mil millones de veces durante la vida de un perro o gato.1, 2
Con una carga de trabajo continua, un corazón sano tiene un metabolismo de energía más alto en reposo que cualquier otro órgano del cuerpo. Se necesitan muchos nutrientes para mantener las miles de mitocondrias que producen ATP dentro de cada cardiomiocito para mantener el corazón bombeando, latido tras latido.3, 4
Sin embargo, a menudo se pasa por alto la función de la nutrición en la salud cardíaca.
La investigación de Purina muestra que una mezcla específica de nutrientes puede mejorar los indicadores cardíacos clave y ayudar a que la cardiopatía tenga una progresión más lenta en los perros con enfermedad mixomatosa de la válvula mitral (MMVD, del inglés myxomatous mitral valve disease) en etapa temprana.5
Si la intervención nutricional puede ralentizar la progresión de la etapa temprana de la MMVD en los perros, ¿en qué otras cosas podría ayudar la nutrición en relación con la salud del corazón?