Información útil sobre las necesidades de perros y gatos con condiciones de salud sensibles a la nutrición.
Trastornos cardiovasculares
Los gatos con enfermedades cardíacas a menudo escapan a la detección temprana de la enfermedad porque es posible que no tengan un soplo cardíaco sospechoso ni que muestren signos clínicos de insuficiencia cardíaca hasta que presentan una dificultad respiratoria o una parálisis debido a un tromboembolismo aórtico.
El cuidado de los gatos con ICC se basa en el tratamiento de los signos clínicos y la ayuda a la función cardíaca, y las modificaciones nutricionales contribuyen a estos objetivos1,2.
Las recomendaciones alimentarias se centran en mantener la ingesta calórica y de proteínas de los gatos, evitar la ingesta alta de sodio, proporcionar ácidos grasos omega-3 y controlar las deficiencias de nutrientes3-5.
Los antecedentes alimenticios pueden ser decisivos.
El sodio puede ingresar desapercibidamente a las dietas de los gatos: Más del 30 % de los gatos con cardiopatías reciben golosinas y el 34 % de los gatos reciben sus medicamentos con alimentos que pueden tener un alto contenido de sodio, según una fuente8.
Este enlace te llevará a un artículo en inglés que no está disponible en español. El corazón es un órgano vital que depende de nutrientes específicos y un suministro continuo de energía para apoyar y mantener una frecuencia y ritmo regulares, pero a menudo se pasa por alto el papel de la nutrición en la salud cardíaca de las mascotas.
Evalúa la condición corporal de tu gato en solo 3 simples pasos