Información útil sobre las necesidades de perros y gatos con condiciones de salud sensibles a la nutrición.
Trastornos musculoesqueléticos
La osteoartritis es un trastorno articular común en los gatos. Aunque se da en gatos jóvenes, el riesgo de osteoartritis aumenta con la edad.1 Los signos clínicos de la osteoartritis incluyen la reticencia a saltar o la reducción de la altura de los saltos, la evacuación y micción inadecuadas (debido a la incomodidad al usar la caja de arena o en la postura durante la evacuación o micción) y una apariencia desaliñada debido a un menor aseo. Aunque los gatos con osteoartritis pueden ser menos activos, algunos gatos con osteoartritis están inquietos debido al dolor y por ello son más activos. Los gatos afectados no suelen mostrar una cojera evidente, como suele ocurrir en los perros con osteoartritis.
En la osteoartritis, tanto la inflamación como el estrés oxidativo son factores que pueden contribuir al deterioro del cartílago y otros tejidos articulares. Un enfoque de tratamiento multimodal que incluya una nutrición específica puede ayudar a mantener la salud de las articulaciones de los gatos con osteoartritis.
En un estudio, el 100 % de los gatos de más de 10 años tenían signos radiográficos de osteoartritis.1
“Nuestro objetivo es apoyar la movilidad de tu gato. Para ello, queremos mantenerlo en una condición corporal ideal o magra, ya que reducirá la tensión adicional en sus articulaciones. Puedes controlar regularmente la condición corporal de tu mascota en casa. Es fácil: basta con comprobar la cintura, la barriga y palpar las costillas. Además, la alimentación con una dieta especial puede aportar nutrientes que favorezcan la salud articular de tu gato”.
Evalúa la condición corporal de tu gato en solo 3 simples pasos